28.3.07

Marcha en defensa de las semillas, contra los transgénicos y UPOV
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En el Marco de la celebración del Segundo Aniversario de Paraíso Libre de Cultivos Transgénicos.

Paraíso de Cartago Viernes 30 de marzo 10:00AM.

Saliendo de la Biblioteca por las principales calles de Paraíso.

PROYECTO DE OBTENTORES VEGETALES EXP 16.327




El Proyecto de Obtentores Vegetales, Exp 16.327 se inscriben dentro de las regulaciones de propiedad intelectual: a) La aprobación a más tardar el 01 de Junio del 2007, del Convenio para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV 91) el cual ha sido conocido y archivado en dos ocasiones en pasadas legislaturas de este congreso, debido a que establece un sistema de propiedad intelectual sobre plantas y seres vivos que atenta contra el derecho de los agricultores, campesinos e indígenas, de disponer e intercambiar libremente sobre las semillas de su propia cosecha, y b) la adhesión de Costa Rica, a más tardar el 01 de Enero del 2006 al Tratado de Budapest y su reglamento, normativa que pretende patentar microorganismos (dictaminado por la Comisión de Asuntos Internacionales).
Esta aceleración de los proyectos de la agenda de Implementación, en materia de propiedad intelectual, ha sido la propuesta mecánica de los 38 votos a favor del TLC, que se manifiesta en el plenario legislativo el pasado jueves 22 de marzo del 2007; con una moción para aplicar la vía rápida al proyecto de Obtentores Vegetales y llevar a comisión plena los proyectos de Observancia y Marcas. Es importante mencionar que las organizaciones sociales, fundamentalmente campesinas, ecologistas, indígenas y comunales, sentimos tanto el gobiernos de Costa Rica como los Diputados no concientes en este tema debería considerar los siguientes puntos:

- Que las obligaciones contraídos por Costa Rica en el Acuerdo de los Aspectos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (ADPIC) de la Organización Mundial del Comercio (OMC) no incluyen la adhesión al Tratado de Budapest ni al Convenio de la UPOV, ni a otros tratados mencionados en el Art. 15.2 del Tratado de Libre Comercio Estados Unidos-Centroamérica-República Dominicana (TLC).

- Que nuestra pertenencia a la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) tampoco nos obliga a adherirnos a esos tratados o convenios.

- Que los Estados Unidos pretende lograr en el TLC, ir más allá del ADPIC y de la OMPI tratando de “armonizar” la normativa de derechos de propiedad intelectual conforme a sus propias regulaciones y a la medida de sus necesidades.

- Que si buen la UPOV nació como un sistema sui generis de propiedad intelectual, también es cierto que producto de las reformas de marzo de 1991 (fecha en que fue revisada nuevamente bajo la presión de las transnacionales de la biotecnología con poderosos intereses económicos en el mercado de las semillas) su diferencia con las patentes es en la actualidad mínima por lo que dicho convenio contiene disposiciones que podrían resultar profundamente perjudiciales para nuestro país, especialmente para nuestros agricultores, comunidades y pueblos indígenas, ya que:

a) Elimina no solo el derecho de los agricultores a utilizar libremente las semillas de su cosecha, sino que además, los excluye de su derecho a utilizar las semillas de una cosecha realizada con variedades protegidas para la siembra de cultivos posteriores,

b) Niega la costumbre ancestral de los agricultores y pueblos indígenas de “conservar semillas para la estación siguiente y de intercambiarlas con otros agricultores, aunque se trate de variedades protegidas. Lo cual implicaría una derogatoria tácita para el caso de los agricultores de lo dispuesto en los artículos 287 y 288 del Código Civil, que establece que “ en virtud del derecho de usufructuar las cosas”, derivado del derecho de propiedad, “pertenecen al propietario todos los frutos naturales, industriales y civiles que ellos produzcan ordinaria o extraordinariamente”(Artículo 287) y que son frutos industriales “los que se obtienen por el trabajo o cultivo”(Artículo 288).

c) Significa que en caso de aprobarse dicho convenio, un productor que siembra en su parcela con semillas de su propiedad, producidas a partir de su cosecha, no tendrá derecho a disponer libremente, ni para volver a producir, ni para el intercambio de los frutos de su trabajo, si no cuenta con la autorización y no le paga por ello a un tercero que ni ha participado en el cultivo, ni ha tenido que cargar todos los riesgos soportados por el agricultor para producir esos frutos, ya que el convenio no contempla dentro de las excepciones obligatorias (artículo 15.1) el ejercicio de los “derechos de obtentor” el derecho de los agricultores a utilizar las semillas de su cosecha para sus próximas cosechas.

d) Atenta directamente contra la seguridad y soberanía alimentaria del país, ya que limita severamente la capacidad del país para garantizarse su autoabastecimiento de alimentos básicos y hacerle frente a posibles crisis alimentaria.

e) Por lo que de ratificarse dicho instrumento internacional, en un plazo de diez años el mismo se le aplicaría a todas las especies de plantas existentes en el país incluyendo aquellas que son indispensables para la alimentación de los costarricenses.

f) Establecería obtener o reconocer derechos de obtentor sobre estas variedades, los titulares de estos derechos podrían exigir el pago de licencias (patentes) para poder reproducirlas, lo que encarecería y dificultaría el acceso a las semillas de plantas esenciales para el abastecimiento interno del país, lo cual en una situación de crisis ocasionada por desastres naturales, guerras u otro tipo de calamidades podría tener graves implicaciones para la seguridad y soberanía alimentaria del país.

Ante estos graves hechos nuestras organizaciones manifiestan:

Ø Que el Convenio de Protección de Obtenciones Vegetales (UPOV 91) lesiona de forma severa los derechos de nuestros agricultores, comunidades rurales y pueblos indígenas; pone en grave peligro nuestra seguridad alimentaria y atenta directamente contra la preservación de nuestra diversidad biológica y cultural; razones por las cuales este convenio debe ser rechazado.

Ø Que las leyes internacionales de patentes, no existen para proteger ninguna vida; sino el capital de las transnacionales

Ø Que ni las semillas ni los microorganismos pueden ser considerados como propiedad privada, pues esto implica la meta final del capital transnacional de convertir todo el planeta en un artículo del mercado.

Ø Que dado que el artículo 9. 14 del TLC establece que “las partes podrán mantener o adoptar medidas que protejan la salud o la vida humana, animal; siempre y cuando dichas medidas no se apliquen en forma que constituyan una restricción encubierta al “comercio” entre las partes” dicho tratado también ubica los intereses comerciales de algunos pocos, por encima de la producción y reproducción de la vida misma, exigimos el retiro inmediato del TLC y los proyectos de su agenda de implementación, de la corriente legislativa.

Ø Que las leyes no adquieren legitimidad democrática por la simple aplicación del principio numérico de la mayoría, por lo cual la aceleración arbitraria para imponer tanto el TLC como los proyectos de su agenda de implementación, mediante una mayoría mecánica, que pretende hacer una reforma arbitraria al reglamento legislativo es un irrespeto a las normas democráticas profundamente enraizadas en nuestro ser costarricense. La democracia no es únicamente un conjunto de reglas y procedimientos. La democracia es, en esencia, respeto y debate de ideas. El TLC no ha sido debidamente discutido ante nuestro pueblo y más de la mitad de sus capítulos no fueron tratados por el fondo en la Comisión de asuntos Internacionales, mientras que en los capítulos que si pudieron ser discutidos, en el campo de las ideas, quienes defiende dicho tratado, han sido derrotados.

Ø Que dado lo todo lo anterior, las organizaciones sociales como: Movimiento Cultura Frente al TLC, El Bloque Verde- FECON, Frente Agrario y Campesino contra el TLC, la Unión de Pequeños Productores Agropecuarios (UNAG), Talamanca por la Vida y la Tierra, MAOCO, la Red en Coordinación en Biodiversidad y otras organizaciones sociales y gremiales, aglutinadas en la Coordinadora Nacional de Lucha hacen pública su oposición expresa a este proyecto y a todo el proceso de la agenda de implementación

Por un mundo socialmente justo y ecológicamente sano

Pronunciamiento sobre UPOV del 13 de febrero en el marco del carnaval de la semilla

Movimiento Cultura Frente al TLC-Bloque Verde-FECON-Unión Nacional de Productores Agropecuarios(UNAG)

En momentos en que la Sala Constitucional se encuentra analizando la consulta de constitucionalidad (presentada por 19 diputados) de la reforma al artículo 41 Bis del reglamento de la Asamblea Legislativa (con cual pretendían dar una vía rápida al Tratado de libre Comercio) razón por la cual se encuentra pospuesto el trámite legislativo del tratado en espera que la Sala Constitucional emita su criterio al respecto; es que nos encontramos ante una aceleración orquestada desde la Presidencia de la República, e implementada por la "mayoría mecánica" de la Asamblea Legislativa, para aprobar a toda costa, pese a la amplia, diversa y sólidamente argumentada oposición social, los proyectos de la así llamada Agenda de Implementación, la cual no es otra cosa que una serie de obligaciones contraídas por el equipo negociador de Costa Rica, para que entre en vigencia el TLC. Dichas obligaciones se traducen la aprobación en la Asamblea Legislativa, en plazos de tiempo previamente establecidos por los negociadores costarricenses, de un conjunto de 13 proyectos de ley, entre los que se contempla no solo la apertura de las telecomunicaciones y los seguros, sino además una serie de regulaciones en materia de propiedad intelectual.

Figuran entre las regulaciones de propiedad intelectual: a) La aprobación a más tardar el 01 de Junio del 2007, del Convenio para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV 91) el cual ha sido conocido y archivado en dos ocasiones en pasadas legislaturas de este congreso, debido a que establece un sistema de propiedad intelectual sobre plantas, que atenta contra el derecho de los agricultores y campesinos de disponer libremente sobre las semillas de su propia cosecha, y b) la adhesión de Costa Rica, a más tardar el 01 de Enero del 2006 al Tratado de Budapest y su reglamento, normativa que pretende patentar microorganismos (dictaminado por la Comisión de Asuntos Internacionales y Comercio Exterior durante la semana anterior.)

Ante la aceleración de los proyectos de la agenda de Implementación, en materia de propiedad intelectual antes citados, para su respectivo dictamen en las comisiones correspondientes, nuestras organizaciones consideran:

Ø Que las obligaciones contraídos por Costa Rica en el Acuerdo de los Aspectos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (ADPIC) de la Organización Mundial del Comercio (OMC) no incluyen la adhesión al Tratado de Budapest ni al Convenio de la UPOV, ni a otros tratados mencionados en el Art. 15.2 del Tratado de Libre Comercio Estados Unidos-Centroamérica-República Dominicana (TLC).

Ø Que en el Acuerdo de los Aspectos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (ADPIC) no se exigen las patentes de variedades de plantas, ni se menciona la protección de “invenciones biotecnológicas”, ni el depósito centralizado de microorganismos.

Ø Que nuestra pertenencia a la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) tampoco nos obliga a adherirnos a esos tratados o convenios.

Ø Que los Estados Unidos pretende lograr en el TLC, ir más allá del ADPIC y de la OMPI tratando de “armonizar” la normativa de derechos de propiedad intelectual conforme a sus propias regulaciones y a la medida de sus necesidades

Ø Que con respecto al Tratado de Budapest, lo anterior más allá de resolverle a Costa Rica “las dificultades para cumplir con el requisito de divulgación para la concesión de patentes que involucran microorganismos” –como afirman sus defensores- su razón final es facilitar dicho proceso a los solicitantes de patentes, en primer lugar de las corporaciones transnacionales.

Ø Que tanto en las discusiones del Consejo de los Acuerdos de los Aspectos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (ADPIC) como en el Tratado de Budapest, ni siquiera se ha llegado a un acuerdo para definir qué es un microorganismo.

Ø Que si buen la UPOV nació como un sistema sui generis de propiedad intelectual, también es cierto que producto de las reformas de marzo de 1991 (fecha en que fue revisada nuevamente bajo la presión de las transnacionales de la biotecnología con poderosos intereses económicos en el mercado de las semillas) su diferencia con las patentes es en la actualidad mínima por lo que dicho convenio contiene disposiciones que podrían resultar profundamente perjudiciales para nuestro país, especialmente para nuestros agricultores, comunidades y pueblos indígenas, ya que:

a) Elimina no solo el derecho de los agricultores a utilizar libremente las semillas de su cosecha, sino que además, los excluye de su derecho a utilizar las semillas de una cosecha realizada con variedades protegidas para la siembra de cultivos posteriores, lo cual es negar la costumbre ancestral de los agricultores de “conservar semillas para la estación siguiente y de intercambiarlas con otros agricultores, aunque se trate de variedades protegidas. Lo cual implicaría una derogatoria tácita para el caso de los agricultores de lo dispuesto en los artículos 287 y 288 del Código Civil, que establece que “ en virtud del derecho de usufructuar las cosas”, derivado del derecho de propiedad, “pertenecen al propietario todos los frutos naturales, industriales y civiles que ellos produzcan ordinaria o extraordinariamente”(Artículo 287) y que son frutos industriales “los que se obtienen por el trabajo o cultivo”(Artículo 288).

Lo anterior significa que en caso de aprobarse dicho convenio, un productor que siembra en su parcela con semillas de su propiedad, producidas a partir de su cosecha, no tendrá derecho a disponer libremente, ni para volver a producir, ni para el intercambio de los frutos de su trabajo, si no cuenta con la autorización y no le paga por ello a un tercero que ni ha participado en el cultivo, ni ha tenido que cargar todos los riesgos soportados por el agricultor para producir esos frutos, ya que el convenio no contempla dentro de las excepciones obligatorias (artículo 15.1) el ejercicio de los “derechos de obtentor” el derecho de los agricultores a utilizar las semillas de su cosecha para sus próximas cosechas.

b) Atenta directamente contra la seguridad alimentaria del país, ya que limita severamente la capacidad del país para garantizarse su autoabastecimiento de alimentos básicos y hacerle frente a posibles crisis alimentarias. En su artículo 3.2 el convenio obliga a los Estados que lo ratifiquen a aplicar las disposiciones contenidas en él, en una primera etapa a partir de su ratificación por lo menos a 15 géneros y especies vegetales y a más tardar 10 años después “a todos los géneros y especies vegetales”, sin excluir ninguna. Por lo que de ratificarse dicho instrumento internacional, en un plazo de diez años el mismo se le aplicaría a todas las especies de plantas existentes en el país incluyendo aquellas que son indispensables para la alimentación de los costarricenses, lo cual a su vez significa que podrían obtenerse o reconocerse derechos de obtentor sobre estas variedades y los titulares de estos derechos podrían exigir el pago de licencias para poder reproducirlas, lo cual sin lugar a dudas, encarecería y dificultaría el acceso a las semillas de plantas esenciales para el abastecimiento interno, lo cual en una situación de crisis ocasionada por desastres naturales, guerras u otro tipo de calamidades podría tener graves implicaciones para la seguridad alimentaria del país.

Ante estos graves hechos nuestras organizaciones manifiestan:

Ø El rechazo rotundo a la aprobación del Tratado de Budapest.

Ø Que el Convenio de Protección de Obtenciones Vegetales (UPOV 91) lesiona de forma severa los derechos de nuestros agricultores, comunidades rurales y pueblos indígenas; pone en grave peligro nuestra seguridad alimentaria y atenta directamente contra la preservación de nuestra diversidad biológica y cultural; razones por las cuales este convenio debe ser rechazado.

Ø Que las leyes internacionales de patentes, no existen para proteger ninguna vida; sino el capital de las transnacionales

Ø Que ni las semillas ni los microorganismos pueden ser considerados como propiedad privada, pues esto implica la meta final del capital transnacional de convertir todo el planeta en un artículo del mercado.

Ø Que dado que el artículo 9. 14 del TLC establece que “las partes podrán mantener o adoptar medidas que protejan la salud o la vida humana, animal; siempre y cuando dichas medidas no se apliquen en forma que constituyan una restricción encubierta al “comercio” entre las partes” dicho tratado también ubica los intereses comerciales de algunos pocos, por encima de la producción y reproducción de la vida misma, exigimos el retiro inmediato del TLC y los proyectos de su agenda de implementación, de la corriente legislativa.

Ø Que las leyes no adquieren legitimidad democrática por la simple aplicación del
principio numérico de la mayoría, por lo cual la aceleración arbitraria para imponer tanto el TLC como los proyectos de su agenda de implementación, mediante una mayoría mecánica, que pretende hacer una reforma arbitraria al reglamento legislativo es un irrespeto a las normas democráticas profundamente enraizadas en nuestro ser costarricense. La democracia no es únicamente un conjunto de reglas y procedimientos. La democracia es, en esencia, respeto y debate de ideas. El TLC no ha sido debidamente discutido ante nuestro pueblo y más de la mitad de sus capítulos no fueron tratados por el fondo en la Comisión de asuntos Internacionales, mientras que en los capítulos que si pudieron ser discutidos, en el campo de las ideas, quienes defiende dicho tratado, han sido derrotados.

Ø Que dado todo lo anterior, El Movimiento Cultura Frente al TLC, El Bloque Verde- FECON y la Unión de Pequeños Productores Agropecuarios(UNAG) hacen pública su incorporación a la jornada nacional pacífica y civilista del 26 de Febrero convocada por el Frente Nacional de Apoyo y la Coordinadora Nacional de Lucha contra el TLC, a partir de las 11:00 a.m. y desde la estatua de León Cortés del Paseo Colón.

27.3.07

Conferencia de prensa sobre proyecto de ley UPOV Miércoles 28 de marzo 3:30 PM en la Capilla de Sion de la Asamblea Legislativa


Miércoles 28 de marzo 3:30 PM originalmente en el Salón de Beneméritos fue trasladada la Capilla de Sion de la Asamblea Legislativa. Esto debido a la paranoia y el régimen represivo que crece en nuestro país pues se prohibió las conferencias en el salón de Ex presidentes y Beneméritos dejándonos solo la posibilidad de hacerlas en la Capilla de Sion. Así que ya saben todos podemos asistir a la Capilla de Sion hasta nos la cierren también.

En la conferencia contara con la participación de UPANACIONAL, UNAC, MAOCO, FECON, Movimiento de Cultura, Red de Coordinación en Biodiversidad, Eugenio Trejos Rector del ITEC, representantes de los Concejos Universitarios UCR y UNA, representares Indígenas y diputados PAC, PASE y Frente Amplio.



Más información en www.feconcr.org




26.3.07

Agenda Verde de la semana

Lunes 26 de Marzo, 1.30 a 4 PM, en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional, Auditorio número 1. Foro sobre Red de Acceso a Mercado locales, para las famillas Campesinas e indígenas.

Lunes 26 de marzo, 5pm, FECON, 50mE de la UNED, carretera sabanilla, Reunión del Bloque Verde

Martes 27 de marzo, 5pm, FECON, 50mE de la UNED, carretera sabanilla, Reunión preparatoria de defensores de las ballenas.

Martes 27 de marzo al Sábado 31 de marzo actividades de celebración del primer aniversario de Paraíso sin Transgénicos

Miércoles 28 de marzo Conferencia de prensa sobre proyecto de ley UPOV 3:30 PM en la Sala de Beneméritos de la Asamblea Legislativa con la participación de UPANACIONAL, UNAC, MAOCO, FECON, Movimiento de Cultura, Red de Coordinación en Biodiversidad, rector TEC Eugenio Trejos, representantes de los Concejos universitarios UCR y UNA, representares indígenas y diputados PAC, PASE y Frente Amplio

Miércoles 28 de marzo, 5:00 p.m. en el Auditorio de la Biblioteca de Ciencias de la Salud, ubicado entre la Facultad de Medicina y Odontología. CONVERSATORIO: "Retos del Desarrollo Rural en Costa Rica"

Miércoles 28 de marzo 6:00 p.m. Auditorio Joaquín Gutiérrez Mantel, 2do. piso Facultad de Letras. Propiedad intelectual y Bioética a cargo del Dr. Salvador Darío Bergel de la Universidad de Buenos Aires, Argentina.

Jueves 29 de marzo. 9:00 a.m. Auditorio Facultad de Educación, Foro sobre La propiedad intelectual y la estrategia de las universidades para la protección del conocimiento

Ley de obtenciones vegetales desata nuevos aires de confrontación


Informa-tico.com. El Partido Liberación Nacional (PLN) y sus aliados en el Congreso (socialcristianos y libertarios) lograron fraguar la mayoría de 38 votos para dar el "fast track" al proyecto de ley que permitiría patentar las especies vegetales, lo que desató una sacudida en el plenario legislativo.
El Partido Acción Ciudadana (PAC) y el Frente Amplio, de José Merino, calificaron la sorpresiva acción del partido de gobierno y sus aliados como una "maniobra antidemocrática" y prometieron dar una batalla legal para invalidar el acuerdo, alegando que no se puede aplicar el trámite rápido a este proyecto porque toca aspectos fiscales y de legislación penal.

Por su parte, la Asociación Nacional de Empleados Públicos (ANEP) aseguró que el acuerdo fue resultado de una imposición del embajador estadounidense en San José, Mark Langdale, quien hace pocos días urgió a los partidarios del tratado de libre comercio (TLC) a acelerar la aprobación de las llamadas "leyes complementarias", que aluden a temas como los de propiedad intelectual, telecomunicaciones y seguros.

La decisión adoptada es "un detonante explosivo que certifica la legitimidad democrática de la calle, como el escenario idóneo del desarrollo final de los acontecimientos en el marco de la lucha contra el TLC", advirtió el sindicato de los empleados públicos, tras asegurar que "la confrontación social, abierta y profunda, ya es inevitable y se ha vuelto totalmente imprescindible".

Agenda complementaria

Contrariamente, la jefe de fracción del PLN, Mayi Antillón, celebró la decisión legislativa como un triunfo y aseguró que la Ley de Obtenciones Vegetales permitirá al país cumplir con los compromisos (internacionales) que ha venido adquiriendo en esa materia.

Para los defensores del proyecto, lo que se busca es proteger y estimular a las empresas que realizan inversiones en investigación y desarrollan nuevas variedades genéticas

Sin embargo, para el diputado Merino el proyecto de ley lo que pretende es "entregar la biodiversidad del país a las transnacionales de Estados Unidos y robárselas al patrimonio del pueblo de Costa Rica".

"Este proyecto de ley pretende que una semilla o planta no se pueda guardar, intercambiar o resembrar a no ser que se pague a la transnacional dueña. Tampoco se puede reproducir, vender, importar o exportar o simplemente tener la semilla o la planta. Aunque el agricultor compre las semillas la primera vez, si quiere volver a sembrarlas tiene que volver a pagar. Quien incumpla puede incluso ir a la cárcel", advirtió.

La inscripción como propiedad privada de las especies vegetales es adversada en el país por las universidades públicas, las organizaciones campesinas, los grupos ecologistas y, en general, por los partidos políticos y sectores sociales que se oponen a la ratificación del TLC con Estados Unidos.

¿Conflictos legales?


Tanto Merino como los diputados del Partido Acción Ciudadana (PAC) aseguraron que la aplicación del artículo 41 del Reglamento Legislativo (la vía rápida) a este proyecto de ley, contraviene las mismas disposiciones que regulan el procedimiento.

Esto porque contiene disposiciones que tocan materia de carácter tributario (creación de tributos) y aspectos de tipo penal, que el mismo reglamento excluye del trámite rápido.

Los diputados que se oponen a la ley advirtieron que llevarán el asunto ante la Sala Cuarta y vaticinaron que correrá la misma suerte que el "fast track" aprobado para el trámite del TLC que los magistrados constitucionales rechazaron por contener vicios de procedimiento.

Sin embargo, el PLN sostiene que el proyecto de ley no establece nuevos tributos, sino un "canon" por la prestación de servicios públicos específicos y que esos dos conceptos son diferentes.

Además, afirma que la Ley de Obtenciones Vegetales no crea una figura penal nueva, sino que remite a normas ya establecidas en la Ley de Observancia de los Derechos de Propiedad Intelectual, "ni está fijando penas para un caso específico ni creando una conducta delictiva".

¿Por partes?


Para la ANEP y otros grupos opositores al TLC, la decisión de aprobar la Ley de Obtenciones Vegetales a toda marcha, no es otra cosa que la aplicación de una estrategia para aprobar el TLC "por partes", de manera que una vez que llegue a votación todos los contenidos esenciales ya estén resueltos.

"El objetivos es el mismo: la concreción de los negocios mas fabulosos que presentan los mercados nacionales de telecomunicaciones, seguros comerciales, patentamiento de medicamentos y semillas, entre otros incluidos en ese TLC", aseguró la agrupación sindical.

UPOV, La ley de la hambruna


Por Fernando Vitoria. El proyecto de ley de las obtenciones vegetales, conocida como UPOV, del conjunto de leyes de implementacion del TLC, que se encuentra en estudio en comision en la Asamblea Legislativa le permitiria a las empresas trasnacionales norteamericanas controlar la cantidad de alimentos y la producion agricola costarricense a distancia.

Con esta aberracion de ley, para sembrar una plantacion de chile dulce por ejemplo, usted tendria que comprarle la semilla a una corporacion multinacional norteamericana. Una vez que recoge la cosecha, no tiene derecho a secar la semilla de los frutos que obtuvo, para volver a sembrar sino que nuevamente tendria que volver a pagar cualquier capricho a las corporaciones gringas para poder obtener mas semilla para una nueva siembra.

Bajo la sombra de esta ley suicida para el pais que los diputados del PLN, del ML y del PUSC estan impulsando para las empresas trasnacionales, una persona en samana santa compra un chiverre en la feria del agricultor, hace una miel con el, extrae las semillas, las seca y posteriormente las siembra. Para cuando las matas de chiverre empiezan a desarrollarse llega la fuerza publica a la finca, se le detiene, se le juzga y encarcela por el delito de haber sembrado esta semilla (la cual ya pago cuando compro el chiverre, pues la semilla viene dentro del fruto).

Esta ley que forma parte del paquete de leyes complementarias al nefasto TLC, que se estudia en la Asamblea Legislativa, junto con la aceptacion en el TLC de poner a competir los productos subsidiados norteamericanos contra los productos nacionales sin subvencionar estan diseñadas para hacer desaparecer a los agricultores nacionales y reducir la poblacion en los paises latinoamericanos, mediante la imposicion de una hambruna para asi poder saquear mas libremente nuestros recursos.

Cualquier costarricense que acepte y apruebe esta legislacion esta condenando a la poblacion a morir de hambre irremisiblemente en el corto, mediano o largo plazo. Los politicos y legisladores que impulsan esta legislacion deben serconsiderados y tratados como traidores a sus semejantes, a la naturaleza y a la patria.

Los norteamericanos, a traves de edecanes y esbirros criollos en los paises pobres del planeta quieren aduenarse mediante invasiones militares y argucias legales del planeta y sus recursos. Las legislaciones TLC que impulsan contra viento y marea, pretenden disminuir sensiblemente la poblacion de los paises pobres, estringiendoles el acceso a la alimentacion basica, para que de esa forma no puedan consumir los productos agricolas de sus propias tierras.

De todas las perniciosas medidas que con el TLC buscan someter la poblacion costarricense a la depredacion de las empresas multinacionales, el UPOV es tal vez la mas funesta, la mas necrofila, la mas peligrosa.

El controlar las semillas, les permitiria a estas empresas de la muerte robar mas facilmente los recursos costarricenses para luego ser trasladados a Estados Unidos.

Un pais que acepte esta legislacion insana esta condenando a su pueblo a desaparecer paulatinamente de la faz de la tierra para seguir engordando a los ya excesivamente obesos y acaudalados norteamericanos.

HUELGA NACIONAL CONTRA EL TLC Y LEYES COMPLEMENTARIAS!

UPOV es traición

Por Flora Fernández. “UPOV son las siglas de Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales, es una organización intergubernamental con sede en Ginebra, Suiza. La misión de la UPOV es proporcionar y fomentar un sistema eficaz para la protección de las variedades vegetales, con miras al desarrollo de nuevas variedades vegetales para beneficio de la sociedad”. (Dato obtenido de la página de UPOV).

¿Quien puede entender algo tan complicado?

Para explicar en sencillo, el Convenio UPOV implica que si una empresa se dedica a manipular semillas y logra, mediante cruces, y selección, o bien mediante experimentación genética, una nueva variedad, podría llegar a adquirir derechos de propiedad intelectual sobre las mismas, ya sea mediante la adquisición de un certificado de obtentor o bien de una patente.

¿Qué es eso de la propiedad intelectual?

La propiedad intelectual nació como una forma de reconocer el esfuerzo de la persona que inventa un objeto nuevo de manera que sólo ella pudiera explotarlo o bien darlo a terceros bajo licencia de uso.

¿Patentar la vida?

Inicialmente sólo se otorgaba propiedad intelectual sobre cosas y nunca sobre seres vivos, pero en 1930 Estados Unidos empezó a dar un tipo de propiedad intelectual sobre frutas, árboles y plantas ornamentales. En 1961 se conforma en Europa la Unión para la protección de Obtenciones Vegetales (UPOV) que se ha organizado alrededor de acuerdos de sus miembros, el más reciente de 1991.

Según el Convenio UPOV-91, si un agricultor compra una semilla (pagando la licencia correspondiente o regalía) la siembra y luego reserva unas semillas para la siguiente cosecha, tendría que volver a pagar una nueva regalía, aunque provengan de su propio trabajo… ¡Si no paga, va a la cárcel!

¡Sí!, las semillas que Tatica Dios nos regaló a los seres humanos para que las sembráramos, para el sustento solidario de la especie humana, repentinamente se convierten en un “artículo inventado” propiedad de otros, principalmente transnacionales de semilleras quedando así la capacidad de reproducción monopolizada por quien consigue ser “dueño de la propiedad intelectual”.

Diay ¡libertarios! ustedes dicen que se oponen a los monopolios… ¿se les pasó este “detallecito”?

Para vergüenza nacional, el 22 de marzo del 2007, dos días después de celebrarse 151 años de la gesta patriótica de Santa Rosa, 38 diputados de la Asamblea Legislativa en lugar de tener la decencia de honrar la memoria de don Juanito Mora y la sangre derramada de los héroes defendiendo la Patria, aprobaron la vía rápida para acelerar la discusión del Convenio UPOV que es parte del TLC, una de las peores partes.

¿A quien sirve UPOV?

UPOV ofrece beneficios principalmente a corporaciones transnacionales que comercian semillas, (tales como Monsanto, Dupont, General Mills, Dow Chemical y otras ¡que podrán cobrar por “el nuevo invento”! en detrimento de los pequeños y medianos agricultores y la pérdida de la biodiversidad. Por eso, los legisladores anteriormente habían rechazado su aprobación. En esa oportunidad los consejos universitarios de la UCR, la UNA y del Tecnológico así como diversas organizaciones y movimientos de agricultores y de ecologistas, fueron categóricos en rechazar la propuesta de ley nacional ante la comisión de asuntos agropecuarios. Los legisladores entonces no fueron sordos y serviles como los actuales.

¿Y los indígenas?

El Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), del que Costa Rica forma parte, exige que se realice la consulta a esa población en sus lenguas. Recordemos que para que el maíz se reproduzca, se conserve y mejore la semilla, debe ser sembrado, se necesita la mano humana. El maíz no se “domesticó” sólo, fueron varias generaciones de indígenas que lo cuidaron y nunca cobraron por ese servicio.

Desgraciadamente, como ya varios diputados están acostumbrándose a no escuchar al pueblo y menos a los indígenas, que son tan pobres y además no suelen votar, porque no tienen razones para creer en una democracia y un sistema, que no les da de comer, que se ha corrompido manteniéndoles en el más vergonzoso nivel de abandono y de pobreza.

Probablemente la consulta no se hará, porque anticipan que la población indígena se opondrá y los diputados consideran que la traducción sería muy “costosa y complicada”. Simplemente no les interesa.

El diputado Echandi, que hace poco salió de la Defensoría y condicionó su voto a la agenda de desarrollo, se ha convertido en el más entusiasta defensor de la vía rápida y hasta manifestó que la UPOV es importante. ¿Leyó siquiera el informe de la Defensoría y otros que revelan sus nefastas consecuencias? ¿O simplemente alguien le dijo que era bueno votarlo?

¿Estarán conscientes los diputados y diputadas que los agricultores con UPOV, estarían perdiendo sus derechos milenarios de intercambiar semillas con otros vecinos con fines de mejoramiento, base de la agricultura y de la variabilidad de especies?

¿Olvidaron que hace menos de un año ellos mismos aprobaron el llamado Tratado Internacional de la Semilla de la FAO, el cual dice específicamente que se deben garantizar los derechos de los agricultores a conservar, utilizar, intercambiar y vender material de siembra o propagación conservado en las fincas?

Bajo el supuesto, que con tal de conservar los beneficios de la Cuenca del Caribe (que ahora sabemos nunca peligraron), los negociadores entregaron telecomunicaciones, seguros, el agua, los recursos naturales, accedieron se perjudicara todos los servicios públicos incluyendo la educación pública y que la bioprospección fuese materia de comercio, que las controversias se eleven a instancias internacionales… mejor no seguimos haciendo la lista de barbaridades que “negociaron” para no decir que entregaron el país.

De todos esos daños, UPOV es tan grave que sería razón suficiente para rechazar el TLC entero.

Y a mí que me expliquen, ¿qué les hizo pensar a los 38 diputados y a sus asesores que meter la ley nacional para acceder UPOV por la vía rápida de primero tiene algún sentido si es uno de los más impopulares convenios de todo el TLC? ¿Están seguros que pueden discutir por la vía rápida un Convenio que tiene materia penal y fiscal?

Ojalá otra vez los diputados metan la pata para bien del país, que se les trabe UPOV y TLC, porque con la mala fe no se vale jugar, y así nos den el gustazo de declararlos traidores a la Patria.