- Nuevo estudio satelital demuestra que piñeras aceleran ritmo de deforestación
(Bloque Verde, 10-08-2022) Entre el año 2015 y el 2019 se reportan la desaparición 1.234 hectáreas de bosques en manos de las empresas piñeras. Esto arroja el último estudio publicado por el sistema de Monitoreo del Cambio de Uso y Cobertura de la Tierra en Paisajes Productivos (MOCUPP) es una herramienta que registra con precisión satelital los cambios en el uso y cobertura de la tierra, y reporta los procesos de deforestación asociados a la dinámica agrícola en Costa Rica.
Hay que recordar que ya esta herramienta satelital había reportado que entre el año 2000 y el 2015 múltiples fincas piñeras deforestaron de forma ilegal 5.566 hectáreas de áreas de protección en margenes de ríos y humedales(1). Para el año 2016 el MOCUPP también alertó sobre la existencia de 1.112 hectáreas de piña dentro de Áreas Silvestres Protegidas. Precisamente para ese momento en el Refugio Vida Silvestre Barra del Colorado se invadieron 614,26hectáreas; en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Mixto Maquenque se invadieron 193,06 hectáreas; y en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Corredor Fronterizo se invadieron 304,6 hectáreas (2).
El nuevo reporte de MOCUPP publicado recientemente señala que entre los años 2016 y 2019 el monocultivo de la de esta fruta deforestó 1.234 hectáreas más. Es decir, si sumamos los años monitoreados por esta herramienta satelital nos da un saldo de 6.800 hectáreas menos de bosques que ha depredado esta industria. Esto quiere decir que la expansión piñera ha deforestado ilegalmente el equivalente en tamaño al cantón de Poas de Alajuela.
Para 2019 el cultivo de la piña alcanzó las 65.600 hectáreas a nivel nacional. San Carlos el cantón con más área ocupada por el monocultivo de esta fruta, con 18.509 hectáreas. Luego le sigue los Chiles con 8.742 y Buenos Aires con 6.870 hectáreas.
Estos datos salen a la luz en medio las emergencias en la Zona Norte debido a las fuertes lluvias. Se reportan tan solo en la última semana 91 incidentes como inundaciones, desbordamiento de ríos, deslizamientos, daños en acueductos rurales y grande pérdidas materiales todavía indeterminadas. No es casual que la zona más afectada por estos desastres sean los cantones con mayor cantidad de monocultivo de piña como es San Calor y Los Chiles.
El riguroso estudio del MOCUPP es una prueba fehaciente que las autoridades judiciales podrían usar para castigar los delitos por deforestación ejecutados por la industria piñera nacional.